Veintiocho días pasaron de aquella noche mágica de Avellaneda donde el Guapo alcanzó la gloria al llegar a la Primera División. Y mientras los hinchas siguen dando rienda a los festejos, esta semana el equipo de Rodolfo De Paoli viajó hacia Uruguay para continuar con la puesta a punto para afrontar el máximo torneo del fútbol argentino. 

El Sitio Oficial del Club conversó con el entrenador de cara a lo que se le viene al Guapo sin dejar de repasar las sensaciones de la consagración en el reducido y del primer amistoso de la pretemporada.

¿Cómo fue el día después al ascenso? ¿Te permitiste disfrutarlo?
Poco. Si bien lo que se vivió en cancha de Racing fue increíble, un desahogo y una alegría inmensa, enseguida nos pusimos a delinear y armar lo que se nos venía. Soy consciente que hicimos historia en el Club, pero había que empezar a trabajar porque los tiempos son cortos y el fútbol es parte de una vorágine que te lleva a estar metido 100% sin distraerte. Seguramente en unos años me permitiré disfrutar de lo conseguido. 

¿Cómo arrancaste el año laboral?
A pleno y con toda las energías puestas en lo que se nos viene. La verdad que me saco el sombrero por Mati (Tapia) y esta dirigencia que se movió tan rápido al punto de ser el equipo que más se reforzó hasta el momento. 

¿Cómo fue la elección y la incorporación de los futbolistas que se sumaron?
La elección fue toda nuestra, obviamente consensuada con la dirigencia. Tratamos de elegir en los puestos donde sufrimos las bajas y reforzar en donde consideramos que era necesario. Por suerte la rapidez con la que se movieron los dirigentes nos permitió arrancar los entrenamientos con casi la totalidad del plantel a disposición.

¿Qué podés contar de las incorporaciones? 
Principalmente que están a la altura de las exigencias que pretendemos como cuerpo técnico. Los dos chicos de River -Gutiérrez y Lecanda- son grandísimos jugadores con una proyección importante. Díaz y Calderara, más allá de ser jóvenes, vienen con recorrido y experiencia en la Liga Profesional y ni hablar de Nico Ferreyra. Neri Bandiera es otro con experiencia en la categoría y un jugador que intentamos traer en otros mercados al igual que Facu Castro, a quien queríamos para la segunda parte del torneo de la Primera Nacional pero no pudo ser y por suerte ahora lo tenemos con nosotros. A Blanco, Saracho y Mater la gente ya los conoce porque los enfrentamos en All Boys, Quilmes y Almirante Brown y nos pueden dar mucho. Y Mouche no lo voy a descubrir yo, el mundo del fútbol argentino lo conoce. En los últimos días llegó Bruno Sepúlveda, un jugador que también viene con recorrido en Primera División.

¿Cómo lo viste a Pablo en estos primeros entrenamientos?
Me atrevo a decir que desde lo físico es el que mejor está. Cuando nos lo ofrecieron hicimos algunas averiguaciones y nos dieron las mejores referencias. Y al verlo entrenar nos dimos cuenta que es así.

¿Se plantearon algún objetivo?
Aspiramos a encontrar el equipo lo más pronto posible. Son muy importantes estos amistosos de pretemporada. Más allá de los rivales y el resultado, lo que me interesa es tratar de darle forma a un once que sea competitivo y esté a la altura y exigencia de lo que representa la máxima categoría del fútbol argentino. 

¿Qué análisis hacés del primer amistoso ante Peñarol?
Sabemos que la jerarquía del Manya es importante a la hora de enfrentarnos, ellos se están preparando para la Copa Libertadores a pesar de haber puesto algunos jugadores de recambio. Hubo momentos de muy buen juego, pero al momento de definir en las áreas se vio la diferencia. No tenemos que perder de vista nuestro horizonte que es continuar con los amistosos para tener todo listo el jueves 10 de febrero para debutar oficialmente en Santiago del Estero.

¿Tenés el once en mente ya?
El once no, pero sí tengo una idea de la base y alguno que otro más. Así y todo es prematuro aventurar cuando tenemos todavía la pretemporada por delante.

¿Qué le podés decir al hincha que está con la emoción y la felicidad de enfrentar a equipos como Boca e Independiente por ejemplo?
Al hincha primero agradecerle por el apoyo incondicional que nos brindó todo el año pasado. En un principio desde afuera, ya que la pandemia les impidió ver gran parte del torneo y después con lo que aportó cuando el equipo los necesitaba en las instancias finales. Y segundo llevarles la tranquilidad que estamos trabajando junto con los dirigentes para que Barracas Central tenga en la Primera División del fútbol argentino un equipo que lo identifique y que esté a la altura de la competencia. Trabajamos para competir en Primera División.

Auténtico y sincero como siempre, Rodolfo De Paoli  comienza a darle forma al Guapo para afrontar el torneo más importante de su historia.