Como cada 18 de abril, Barracas celebra un nuevo aniversario del histórico campeonato de Primera B, en la recordadísima final ante Excursionistas en Villa Crespo que quedará grabada para siempre en la memoria de cada barraqueño.

Siempre es un motivo para festejar el recuerdo de un ascenso y cada uno en particular tiene su toque especial. El del 2010 desde la gesta heroica de remontar un campeonato que parecía imposible y perdido hasta la manera en que se resolvió la finalísima con los del Bajo Belgrano: el agónico gol de la Flecha Salom que depositó al Guapo en la tercera categoría después de muchas décadas.

Sin embargo, nada sería igual en el gran presente barraqueño de la Liga Profesional sin esa jornada en cancha de Atlanta: desde protagonistas que siguen ligados a Olavarría y Luna hasta tomar al 18/04/2010 como la levantada histórica del Guapo en los torneos de ascenso, en el retorno a la élite del fútbol nacional.

Con los cortos y barro en el suelo, Alejandro Orfila comandaba a Barracas hacia la historia, como lo hace hoy del otro lado de la línea de cal; lo mismo para Guillermo Almada Flores, de la elegancia en su juego ofensivo al armado y planificación de cada partido actual del Guapo en Primera. Y ni hablar de Carlos Arce, por aquel mediodía como un joven lateral derecho y sin ningún ascenso en su carrera a hoy ser una institución en Barracas con mil batallas y tres estrellas bordadas.

Hoy el presente es histórico. Pero Barracas sabe que una parte de la historia comenzó a forjarse en aquel tiempo de descuento en Villa Crespo.